viernes, 3 de mayo de 2013

LA GRAN BODA (The big wedding)



Mientras veía “La gran boda” no pude evitar que mi mente asociase a la mayoría de sus actores con otros personajes interpretados en comedias de antaño por ellos mismos y con idéntica fortuna. Es decir, ninguna. Para dar vida al sacerdote, Robin Williams se habrá basado en su desesperante recreación del religioso de la insoportable “Hasta que el cura nos separe”, cinta en la que demuestra que, sin un director capaz de frenar unos impulsos más propios de Jim Carrey, termina por convertirse en una mala caricatura. A su vez, Robert de Niro debió pensar que, dejándose barba, evitaría ser comparado con otro progenitor como el de “Los padre de él”, “Los padres de ella” o “Ahora los padres son ellos”. Pese a ser uno de los mejores actores de la historia del cine, no descubro nada nuevo al afirmar con rotundidad que el género cómico no es precisamente su especialidad. Por lo que se refiere a Diane Keaton, le han obligado a repetir diez años después “Cuando menos te lo esperas”, mientras que Susan Sarandon, que hasta ahora no había caído en la tentación de hacer el ridículo en filmes pseudo humorísticos y no tenía pasado del que echar mano, se deja arrastrar por la decadencia de este elenco de primeras figuras de Hollywood que, rozando la setentena, han optado por llenar de borrones sus cuasi impolutas filmografías. Sus jóvenes compañeros de reparto están bastante mejor, sin duda porque, al no contar con el glorioso pasado de sus colegas, tampoco se exponen a unas comparaciones tan odiosas. 

Se trata de un título plagado de buenas intenciones, pero también de tópicos, reiteraciones, copias, plagios y referencias a otros que en su momento ya exprimieron una fruta a la que no le queda apenas jugo. Narra la historia de un matrimonio maduro que ha fracasado por la infidelidad y posterior enlace del esposo con la mejor amiga de su mujer. Ante el inminente enlace de su hijo adoptado, tratarán de hacer creer a su madre biológica -que acudirá a la ceremonia y que mantiene unas profundas creencias religiosas- que continúan felizmente casados. Partiendo de estas premisas, el realizador y guionista Justin Zackham intenta componer situaciones graciosas, hilarantes, irónicas que fracasan en su mayor parte. Además, la sensación de falta de originalidad y de creatividad es patente. Estamos nuevamente ante el enésimo ejemplo de copia disfrazada, unida a la mediocridad de unos gags que pretenden sin éxito concatenar unos fotogramas con otros. 
En resumen, la comedia americana persiste en su particular camino hacia la autodestrucción y, aun con el precipicio delante, acelera. De eso sabe mucho Susan Sarandon desde que participó en “Thelma & Louise”. Y eso que, aunque la mítica película que rodó Ridley Scott de 1991 no era una comedia, contaba con algunas escenas que consiguieron arrancarme la risa y también el aplauso. Claro que estoy hablando de otra clase de cine, otra categoría, otro nivel. 
Entre los integrantes más jóvenes del reparto se salva la actriz Katherine Heigl, una habitual de la comedia que, aunque a veces participa en largometrajes regulares, completa su trayectoria profesional con otros más dignos como “27 vestidos”. Le acompaña la cada vez más popular Amanda Seyfried (“Mamma Mía, Los Miserables). En definitiva, un reparto de primera fila desaprovechado por culpa de un pobre guión que refleja una buena idea mal desarrollada.

Trailer en castellano


Trailer en versión original


Datos del film
Película: La gran boda. Título original: The big wedding.
Dirección: Justin Zackham.
País: USA. Año: 2013. Duración: 90 min. Género: Comedia.
Interpretación: Robert De Niro (Don), Robin Williams (padre Moinighan), Amanda Seyfried (Missy), Katherine Heigl (Lyla), Topher Grace (Jared), Diane Keaton (Ellie), Susan Sarandon (Bebe), Ben Barnes (Alejandro).
Guion: Justin Zackham; basado en la película “Mon frère se marie”.
Producción: Anthony Katagas, Clay Pecorin, Richard Salvatore, Harry J. Ufland y Justin Zackham.
Música: Nathan Barr.
Fotografía: Jonathan Brown.
Montaje: Jon Corn.
Diseño de producción: Andrew Jackness.
Vestuario: Aude Bronson-Howard.

1 comentario:

Meg dijo...

Muy buen repaso de su trayevtoria, estoy deseando ver la gran boda :-) Un beso!